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La mirada tras un convenio siempre parte desde la empresa y CIISA, pero muchas veces son los estudiantes involucrados en el proceso de resolver una problemática, los que cuentan los detalles reales, el detrás de “bambalinas” de todo lo que implica entregar soluciones tecnológicas. Para comprender los esfuerzos y compromisos, invitamos a los protagonistas a entregar su visión.

Abel Saavedra, Cristóbal Ibarra, Sebastián Mena y Diego Flores, cuatro estudiantes de Ingeniería en Informática e involucrados en el convenio con la Vicaría del Arzobispado de Santiago para entregar una solución tecnológica al programa Navidad con el Hermano. Evalúan desde su perspectiva el trabajo realizado, planteando un gran análisis, pero con el deseo de contribuir al instituto y a los estudiantes que viven situaciones similares.

¿Cómo fue tu experiencia, paso, por el convenio con la Vicaría?

Abel Saavedra, estudiante de CIISA.

Saavedra: “Fue bastante bueno en lo práctico ya que nos hizo trabajar bajo criterios del mundo real en un proyecto que tiene un impacto en la sociedad, lo que significó una gran responsabilidad asumir el desafío. En general considero que se abordó de buena forma y pudimos alcanzar el objetivo que se nos planteó. La problemática de la Vicaría va justamente por la gestión de la información, algo muy importante dentro de una organización. Esperamos que este desarrollo pueda beneficiar y alivianar la carga de trabajo de ellos y así poder abarcar más familias, que son las que finalmente reciben los beneficios”.

Ibarra: “Siendo mi primera interacción con un cliente y con un proyecto laboral profesional, la verdad es que fue una muy buena experiencia, no solo aprendes a ejecutar lo aprendido en el instituto, sino que también, te desenvuelve. En nuestro caso tuvimos que aprender a interactuar y a conversar con el cliente, interpretar lo que quería y llevarlo a cabo, gracias a eso también se forjó esa seguridad para que el cliente pudiera contar sus ideas.

En un principio estaba muy preocupado y sinceramente sentí mucho estrés al pensar que no podríamos lograrlo, pero se conversó con el cliente y llevamos a cabo una “Gestión de cambio”, con este cambio dividimos el proyecto en dos fases, por lo cual gracias a eso pudimos abordar los objetivos y nos ganamos la apreciación del cliente respecto a que estábamos siendo transparentes presentándole esta opción”.

Sebastián Mena, estudiante de CIISA.

Mena: “Si bien ya había trabajado anteriormente en proyectos reales, la experiencia fue un acercamiento muy bueno al área profesional. Me hizo interactuar directamente con liderazgo hacia un cliente, ya que fue necesario un buen manejo en diversas áreas, y debí siempre mantener una actitud prolija incluso cuando se logró mucha más confianza. Siempre intenté mantener la línea entre un cliente y la confianza.

A medida que se acercaba la fecha límite para realizar la entrega de nuestro desarrollo comenzó este sentimiento de agobio y alta presión, mis familiares y amigos fueron una parte muy importante para este proyecto, al darme su apoyo y empujones para poder finalizarlo.

Siento que la mayor parte de este fruto se basa en nuestra postura seria hacia el convenio, reflejado al establecer horarios fijos, asignar responsabilidades, generar extensas documentaciones, definir todas las tareas de cada integrante según la fase en que nos encontrábamos”.

Flores: “Al principio tenía miedo en trabajar en un proyecto con un cliente real, pero al ir pasando el tiempo fui agarrando cada vez más confianza en mí y en el grupo, esto permitió al equipo desarrollar habilidades importantes y enfrentar desafíos. Todas las semanas nos reunimos con el cliente para ir presentando los avances de nuestro trabajo en el cual se mostraba la documentación y el software en donde el cliente iba dando sus opiniones sobre el avance, esto permitía que el cliente pudiera estar informado de cómo íbamos en el proyecto, además, le entregamos la seguridad de que esto se iba completando de manera correcta y como ellos querían”.

¿Cómo evalúas la gestión que hace CIISA, por medio de la Clínica Tecnológica donde tributa este tipo de convenio y que acerca a nuestros estudiantes a experiencias más profesionales?

Si bien, cada estudiante ha expresado una opinión certera y sincera acorde a su experiencia los cuatro señalaron la necesidad que CIISA establezca una entidad o proceso de seguimiento, monitoreo, con el fin de conocer la satisfacción del cliente y cómo los estudiantes se van adecuando y cumpliendo los objetivos planteados.

Saavedra: “Desde mi experiencia, si bien los lineamientos siempre fueron entregados por el director del área académica, es importante que la institución cuente con un reglamento interno sobre responsabilidades y derechos del estudiante como parte de la formalización del convenio. Desde el punto de vista de CIISA, permite que los estudiantes se involucren con problemáticas reales y que tienen un alto impacto en la sociedad, teniendo una responsabilidad mucho mayor. Siento que es parte fundamental de la formación académica el conocer y tener la oportunidad de participar de estos proyectos.”.

Cristóbal Ibarra, estudiante de CIISA.

Ibarra: “La gestión de CIISA en el proyecto necesita enfocarse en lo que piensa el cliente y también ver las metas que se han propuesto entre el equipo de alumnos desarrolladores y el cliente.

Respecto a los convenios y la manera en la que el instituto nos acercó con este proyecto fue una gran oportunidad para desarrollar esa confianza, experiencia y habilidades que nos ayudaron a estar más preparados para lo que nos espera afuera, sin duda es brillante lo que hace CIISA con estas experiencias y espero que como nosotros muchos otros estudiantes puedan experimentarlo”.

Mena: “Realizar un monitoreo periódico por parte de una entidad supervisora (sin inclinarse a invadir los tiempos del equipo), participando en las reuniones semanales que manteníamos con cliente, podría generar una buena conexión entre la institución y sus estudiantes, haciendo hincapié al profesionalismo y organización del equipo entero. A grandes rasgos, la supervisión del proyecto tiene aspectos mejorables”.

Flores: “Encuentro que CIISA podría llevar un control de cómo el cliente se va sintiendo con los alumnos involucrados, de igual manera ver cómo los alumnos se sienten en este proceso. Con respecto a los acuerdos ha realizado un trabajo excelente al ofrecer estas oportunidades, y espero que muchos otros estudiantes puedan beneficiarse de ellas como nosotros lo hemos hecho”.

Diego Flores, estudiante de CIISA.